Extremadura: Alerta Sanitaria

¡No queremos pagar sus platos rotos!

En Extremadura, las navidades comenzaron con una relajación extrema de las medidas sanitarias con el famoso «Plan Navidad» del vicepresidente Vergeles, lo cual ha probado ser devastador para nuestra región, que se ha convertido en la comunidad con la incidencia a 14 días más alta de toda España con más de 600 casos por cada 100.000 habitantes. Nos encontramos así en una encrucijada, en la que la región se rige por criterios económicos y laborales antes que sanitarios para gestionar esta tercera ola de la pandemia, pero ¿qué va a pasar con las estudiantes?

En cuanto a la universidad, tanto rectorado como junta siguen apostando por la máxima presencialidad, tanto en el periodo de exámenes de enero que comienza está próxima semana, como en el posterior segundo cuatrimestre. Durante este primer cuatrimestre, las medidas sanitarias y los confinamientos selectivos de positivos y contactos han podido retrasar la llegada de la segunda ola, pero la situación ahora no es la misma, estamos en una tercera ola que surge de las pasadas fiestas Navidad en la que la incidencia es mucho más alta y la movilidad de las estudiantes de la región se ha multiplicado, ¿es realmente seguro volver a la plena presencialidad como en el primer cuatrimestre sin tomar medidas adicionales? ¿Ha tomado el rectorado medidas después de las abundantes problemáticas que encontramos el año pasado con las clases online, o vamos a seguir improvisando?

En Enseñanzas Medias, la situación es distinta, los cursos de 1º de ESO en adelante retomarán sus clases en modalidad online durante al menos la primera semana, mientras que los más pequeños de Infantil y Primaria irían a clase de forma presencial. Es en este punto donde se le comienzan a ver las costuras a este plan de choque educativo, ¿por qué las alumnas de 1º de ESO sí pueden tener clases online y las de 6º de Primaria no? Cabe llegar a la conclusión que estás medidas, una vez más, siguen criterios laborales y económicos, y no sanitarios, mientras que las alumnas más mayores de ESO y Bachillerato pueden quedarse en casa mientras sus padres y madres trabajan, no es así en el caso de los más pequeños, nos encontramos de nuevo la idea de los colegios como parches para la conciliación laboral de los padres y madres.

En Formación Profesional la situación es similar a los institutos y colegios, la modalidad no presencial se mantiene al menos durante una semana. El problema aparece en el apartado de las prácticas, tanto las laborales como las internas, donde se mantiene una política de improvisación y ausencia total de planificación por parte tanto de la Junta como de los institutos, donde algunas estudiantes llevan esperando información sobre sus prácticas desde inicios de curso.

Desde Estudiantes en Movimiento Cáceres, nuestras propuestas son las siguientes:

1. En el caso de Enseñanzas Medias, unificación de las medidas en colegios e institutos bajo criterios sanitarios, unido a un paquete de medidas para facilitar la conciliación familiar.
2. En la universidad, blindar la seguridad de las estudiantes y profesorado, incluyendo la creación de planes de contingencia en el caso de un confinamiento total que obligue a las estudiantes a llevar sus clases online, pero también incidiendo en las medidas de seguridad para llevar las clases presenciales de la forma más segura posible.
3. En esa misma línea, adaptar los exámenes de enero para una entrada y salida escalonada a fin de evitar aglomeraciones en el transporte público que podrían incumplir las medidas sanitarias y empeorar la situación sanitaria.
4. Planificación de las prácticas tanto externas en empresa como formativas en los centros en el caso de la FP para poner fin a la improvisación y permitir a las estudiantes planificar lo que queda de curso.
5. En el caso de la enseñanza online, es necesario un plan para las estudiantes que no disponen de una conexión a internet fiable en sus hogares, como ya se hizo en durante el confinamiento del pasado mes de marzo.
6. Inversión en plataformas de enseñanza online de cara a la vuelta a las clases tras la navidad, tanto en universidad como en enseñanzas medias, tanto en el caso de modalidades presenciales como semipresenciales.
7. Ayuda a los alquileres de las estudiantes para casos de ampliaciones del curso lectivo por la pandemia.

En conclusión, las medidas orientadas a potenciar la economía durante las navidades han llevado a la región a la peor situación epidemiológica de España, y son ahora las estudiantes, en especial las de familias trabajadoras, las que van a sufrir las consecuencias de su gestión.

¡No queremos pagar sus platos rotos!